Tres estados que dependen de la peligrosa disminución del caudal del río Colorado han acordado reducir su consumo, con lo que las autoridades esperan ganar tiempo suficiente para encontrar una solución a largo plazo al agotamiento de una de las fuentes de agua más importantes del país.
Cuarenta millones de personas de Wyoming, Utah, Colorado, Nuevo México, Nevada, California, Arizona y partes de México dependen del caudal del río Colorado, que ha sufrido un descenso aproximado del 33% en los últimos años debido a la sobreexplotación crónica, el crecimiento demográfico y la sequía histórica. Sin el agua del río que llena los lagos Mead y Powell, la vida no podría prosperar en entornos desérticos como Las Vegas y Phoenix.
Por eso, Nevada, Arizona y California se han comprometido a reducir su captación del río Colorado en un 13% –o 3 millones de campos de fútbol de agua– durante los próximos tres años a cambio de 1.200 millones de dólares en pagos federales.
Por Chihuahua Es Noticia