
Por Osbaldo Salvador Ang.
Don Manuel Bernardo Aguirre, el Zorro, Gobernador de Chihuahua de 1974 a 1980, lustraba siempre, a diario, sus zapatos.
No había mañana que no se parara frente a un cajón de algún bolero para hacer que brillaran –y mucho- estas prendas.null
Quienes le conocieron, afirman que no le gustaba sentarse sino que, de pie, subía un zapato y luego el otro para la lustrada.
Un día, su Secretario Particular, Manlio Fabio Tapia Camacho, de origen veracruzano y chihuahuita por adopción, no pudo dejar de observar eso y le hizo la pregunta.
Socarrón como buen jarocho y porteño, Tapita, como le decían sus amigos, era el único que songo-songo, se atrevía a hacerle esos comentarios a Don Manuel.
-¿Por qué bolea tanto sus zapatos, Señor Gobernador? –inquirió el Secretario Particular.
Y el Gobernador respondió:
-¡Porque antes no tenía!
Ciertamente, Manuel Bernardo Aguirre era de origen muy humilde, allá de Baborígame, Municipio de Guadalupe y Calvo, con apenas la instrucción primara.
Dicen que su infancia transcurrió en la pobreza pero su aguda inteligencia nata y su profundo instinto político le ayudaron a crecer hasta el grado de ser Gobernador de Chihuahua y Secretario de Agricultura.
En sus últimos años de vida fue Asesor de Carlos Salinas de Gortari cuando éste ocupó la Presidencia de la República.
Y lo digo desde aquí, porque éste es mi pódium
Tomado de La Opción