LA HISTORIA DEL DÍA EN QUE PUTIN LE JUGÓ UNA MALA PASADA A LA CANCILLER ALEMANA, ANGELA MERKEL

Fue hace varios años, en la residencia del ruso en Sochi. La canciller alemana estaba de visita, cuando el presidente la recibió e hizo pasar a su enorme labrador negro, dejando a Merkel congelada en su asiento ante el avance de la bestia.

El líder ruso parecía sonreír mientras veía a su perro acercarse a su invitada especial.

Ahora, años después, Putin ha explicado el incidente al periódico Bild y aseguró que no quería intimidar a Merkel.

“Quería hacer algo lindo por ella”, le dijo al periódico en una entrevista publicada el lunes.

“Cuando descubrí que a ella no le gustaban los perros, claro que me disculpé”, agregó Putin.

El tratamiento de Putin hacia Merkel, que en ese entonces llevaba menos de dos años en el cargo, irritó al equipo de prensa alemán, según se informó en ese entonces.

Según un perfil de la líder alemana publicado por la revista The New Yorker en 2014, Merkel respondió a la presencia de Koni con una broma. “Después de todo no come periodistas”.

La publicación reportó que la canciller alemana le dijo más tarde a la prensa que Putin había hecho eso para “probar que es un hombre”.

“Entiendo por qué él hizo esto: para probar que él es un hombre. Él está asustado de su propia debilidad. Rusia no tiene nada, ni una política ni una economía exitosas. Todo lo que tiene es esto (el perro)”, dijo Merkel.

Aunque, después de todo esto, no hay duda en que Putin lo hizo como una táctica política de intimidación hacia Merkel.