Lugar histórico sobre la carretera Delicias-Chihuahua.

Nueve años antes de la fundación de la que hoy es la capital del estado, el territorio de Bachimba fue poblado por Fernando Colomo. Era el año de 1700. Como hacienda de San José de Bachimba, este poblado empezó a existir en 1713, cuando estas tierras se mercedaron, es decir, se otorgaron como merced a Juan Ruiz de Hurtado.

¿Qué eran las mercedes?

Además de las posesiones reconocidas por el rey y las tierras adquiridas por los españoles, existían las mercedes reales, tierras cedidas por el rey a cambio de un pago, y que podían ser concedidas mediante un título a un particular o a un pueblo en específico.

Se cree que este sitio debió tener un desarrollo lento durante la época virreinal, porque se batalla para encontrar referencias de los viajeros que transitaron por la región, que apenas mencionan esta hacienda y el cañón del mismo nombre. Por ejemplo, el fraile Agustín de Morfi, acompañante de Don Teodoro de Croix, Comandante General de las Provincias Internas, registra una noticia proveniente de Bachimba, tan vaga que apenas se puede precisar que se trata del mismo lugar. Cabe la posibilidad de que en ese tiempo el camino real no pasara exactamente por este sitio.

Bachimba se localiza en una franja del municipio de Rosales que se interna entre Aldama y Chihuahua al norte, y Meoqui al sur.

Los historiadores refieren que, en el mismo siglo Dieciocho, en aras del poblamiento de la región, el comandante de la Cuarta Compañía Volante con sede en San Pablo, el capitán José Antonio Arce, adjudicó tres suertes (medida de superficie que equivale a poco más de 16 hectáreas) a un vecino de la hacienda de Bachimba. Al adjudicatario, de nombre Juan María Ruiz, se le impusieron las siguientes condiciones para asegurar que residiera aquí, que poblara la tierra y que la explotara:

1.- “Mantener armas y caballos para defender y atacar a los enemigos.

2.- y “Residir con su familia durante cuatro años, en cuyo tiempo no ha de poder heredar, enajenar, hipotecar ni imponer gravamen alguno sobre las citadas tierras aunque sea con motivos y fines piadosos”.


Bachimba fue pasando de mano en mano y todavía en el siglo Diecinueve y principios del Veinte se llegaron a criar toros bravos en ella.

La hacienda es una construcción típica del siglo Dieciocho, con su casa grande con planta rectangular, y su fresco patio central al que se accede desde el exterior por medio de un zaguán. A un costado se observaban en ruinas unos gruesos muros de adobe, en donde probablemente vivían los peones.

Está situada en el kilómetro de la carretera Delicias–Chihuahua y ahí mismo se situaba un parador comercial que incluía una gasolinera, una tienda y restaurante, baños, una desponchadora y un estacionamiento para tráilers. Hoy en día dicho parador ya esta abandonado.

Este abandonado lugar sobre la carretera Delicias-Chihuahua fue hogar de los primeros pioneros de nuestro estado de Chihuahua.

Por Chihuahua Es Historia