Un estudio publicado en Nature Communications en 2022 confirmó el hallazgo de las cinco nucleobases que conforman el ADN y el ARN —adenina, guanina, citosina, timina y uracilo— en meteoritos ricos en carbono como Murchison, Murray y Tagish Lake.
Los investigadores lograron identificar estos compuestos mediante un proceso de extracción con agua y el uso de espectrometría de masas de alta sensibilidad, capaz de detectar concentraciones ínfimas, del orden de partes por billón.
Si bien ya se habían encontrado adenina, guanina y uracilo en análisis previos, esta es la primera vez que se detectan citosina y timina, consideradas más frágiles y difíciles de preservar.
El hallazgo refuerza la hipótesis de que los bloques fundamentales de la vida pudieron haberse formado en el espacio y llegado a la Tierra a través de impactos de meteoritos en sus primeras etapas de formación.
Con este descubrimiento, la comunidad científica suma nuevas evidencias a la teoría de que el origen de la vida en nuestro planeta pudo haber tenido un componente extraterrestre.
Por Chihuahua Es Cultura