Ciudad de México – Antes de convertirse en uno de los actores más reconocidos del cine latinoamericano, Gael García Bernal vivió en Londres con recursos limitados y grandes sueños. Para costear su estancia mientras estudiaba actuación en la prestigiosa Central School of Speech & Drama, trabajaba como mesero, lavando platos y atendiendo barras.
Su carrera daría un giro inesperado cuando recibió un encargo de Alejandro González Iñárritu: grabar una audición en VHS para la película Amores perros. Aunque al principio lo hizo más por curiosidad que por expectativas, semanas después la cinta se convertiría en su boleto hacia el reconocimiento internacional.
Durante el rodaje, García Bernal bromeaba con amigos y profesores, asegurando que sería su única película, e incluso pidió copias en VHS “por si jamás la veía proyectada”. Sin embargo, el estreno de Amores perros fue un fenómeno, y en pocos años el actor protagonizaría Y tu mamá también, consolidándose como figura global del cine.
La historia de Gael García Bernal recuerda que, en ocasiones, un pequeño paso dado sin grandes expectativas puede convertirse en el salto que define toda una carrera.
Por Chihuahua Es Cultura