Este fenómeno meteorológico golpeó con fuerza y cobró la vida de 50 personas, dejó 360 casas completamente destruidas y otras 700 con graves daños.
Esta tromba ha sido hasta la fecha el fenómeno meteorológico con más repercusiones en la época actual de Chihuahua, pues al menos 12 mil familias se vieron afectadas durante las primeras horas de la madrugada, ya que, sin saberlo, muchas colonias fueron asentadas sobre el paso de arroyos y cuyo caudal creció con la fuerte caída de lluvia, arrasando con casas completas en pocos minutos.
Uno de los puntos más afectados por las intensas lluvias fue en La Cantera, donde decenas de casas fueron arrasadas en pocos minutos.
Como resultado de este desastre se crearon colonias como la Nombre de Dios, Ponce de León y Unidad, las cuales albergaron a quienes perdieron todo aquel 22 de septiembre de 1990.