Theresa Fischer sorprendió al mundo al someterse a una cirugía de alargamiento óseo, con la que logró ganar 14 centímetros de estatura.
El procedimiento, conocido como osteogénesis por distracción, consiste en fracturar quirúrgicamente los huesos de las piernas y colocar un dispositivo que los separa lentamente, mientras el cuerpo regenera el tejido óseo.
Pero no se trató solo de estética. Theresa confesó que desde pequeña se sentía insegura por su estatura, y en el mundo del modelaje, eso le cerró muchas puertas.
El proceso fue doloroso, largo y puede costar más de 100 mil dólares. Sin embargo, para ella valió la pena: hoy mide 2.03 metros y afirma que por fin se siente más segura y empoderada.
Su caso plantea una pregunta incómoda:
¿Hasta dónde estarías dispuesto a llegar para encajar?

Por Chihuahua Es Cultura