El lunes 7 de junio de 1999, poco antes del mediodía, el locutor, humorista y conductor de televisión Francisco Stanley Albaitero —conocido popularmente como Paco Stanley— fue asesinado a las afueras del restaurante El Charco de las Ranas, ubicado en Periférico Sur, cerca de San Jerónimo, en la Ciudad de México.
El crimen ocurrió apenas unas horas después de que Stanley concluyera la emisión del programa matutino Una Tras Otra, transmitido por Televisión Azteca, en compañía de Mario Bezares y Jorge Gil.
La noticia se difundió con rapidez. En cuestión de minutos, los medios de comunicación la convirtieron en el tema principal, desatando una ola de indignación que derivó en una dura crítica hacia la creciente inseguridad en la capital. Las primeras reacciones señalaron al gobierno local como responsable indirecto del asesinato. A partir de ese momento, la televisión emprendió una cruzada mediática para exigir justicia y encontrar a los culpables.
Paco Stanley inició su carrera en la emisora XEX-AM, donde colaboró en diversos espacios informativos. Más tarde incursionó en la televisión, especialmente en el ámbito del humor, participando en programas de Televisa como Alegrías de Mediodía y El Club del Hogar. Uno de sus papeles más recordados fue en La Carabina de Ambrosio, donde ganó popularidad como conductor del segmento Mercado de Lágrimas.
Posteriormente, Stanley encabezó exitosos programas como ¡Ándale!, Llévatelo y ¡Pácatelas!. En 1998, se trasladó a TV Azteca, donde produjo Una Tras Otra y Si Hay… y Bien. Además, prestó su voz para anuncios de radio y televisión en las décadas de los 80 y 90, destacando campañas de marcas como Roshfrans y la promoción Pilón, entre otras.
