KFC dejará Kentucky y trasladará su sede a Plano, Texas.
Con ello, alrededor de 100 empleados deberán reubicarse en los próximos seis meses, y aquellos que trabajaban de forma remota, ahora tendrán que acudir a la nueva ubicación.
A pesar de esto, la compañía mantendrá algunas oficinas corporativas en Kentucky, además de un nuevo restaurante insignia.
La reubicación responde a una tendencia post pandemia en la que muchas empresas cambiaron sus sedes, debido a impuestos más bajos. Con sus políticas favorables a las empresas, Texas ha sido la opción de reubicación más popular.