“Le propuse matrimonio a mi esposa sin un peso en la cartera, sin trabajo y con miedo. Ella tenía 23 años cuando quedó embarazada de mí, se sentía devastada, porque sus padres la hacían sentir como una fracasada por haberse ido conmigo. Yo ya había comprado el anillo sin saber cómo lo iba a pagar. No tenía ingresos estables, pero estaba persiguiendo mi sueño.
Después de pasar por tantas cosas, llegaron los logros: llegué a Black & White, Big Brother, Sabadazo, doblaje, conciertos, cine. Personifiqué a Pedro Infante en Netflix, filmé con Ryan Reynolds en Detective Pikachu. Pero también llegó la caída. Lo di todo en un bar donde, sin saberlo, me asocié con alguien ligado al n&%rc, y lo perdí todo. Me deprimí. Me aislé. Pensé en perder la v&/da. Me vi solo, sin sentido, preguntándome qué hacía todavía aquí.

Y fue en ese hueco donde volví a encontrarme. Vendí todo, solté el ego y regresé a lo esencial: mi fe, mi familia, mi propósito. Hoy, después de todo, Lucía siempre confió en mí. Y aunque llevamos más de 20 años casados, todos los días le pregunto si quiere ser mi novia.”
Omar Chaparro sobre cómo el amor, la humildad y la fe lo mantuvieron firme cuando lo perdió todo.
Por Chihuahua Es Noticia